Todo lo que debes saber acerca de las Flores de Bach
Las Flores de Bach son una terapia floral muy utilizada para combatir problemas emocionales y recuperar la salud. Sigue leyendo y aprende más de estos remedios naturales.
Frustraciones, miedo y estrés son emociones con las que tenemos que lidiar día a día. A pesar de los notables avances tecnológicos, siempre estamos buscando formas naturales de combatir estos males. Las Flores de Bach son un método muy utilizado como terapia médica benigna y menos agresiva para ayudar con estas cuestiones.
Las Flores de Bach son un conjunto de esencias naturales elaboradas a partir de una serie de especies vegetales que se utilizan para tratar miedos, traumas, ansiedad, soledad, depresión y estrés. Su finalidad es restaurar el equilibrio emocional de las personas y ayudar en la superación personal para recuperar su salud física.
Esta teoría se origina a partir de la idea de que las enfermedades físicas tienen un origen emocional; si los conflictos emocionales subsisten por mucho tiempo, el cuerpo empieza a enfermarse. Así lo descubrió el investigador, médico y homeópata Edward Bach, quien experimentó con varias flores silvestres hasta encontrar 38 remedios naturales con propiedades curativas -conocidos como Flores de Bach– para distintos problemas emocionales.
Estos preparados son elaborados a partir de una maceración de flores maduras de diversas especies de la región de Gales (de donde es nativo Bach) en agua y Brandy. El resultado es una solución natural sin principios farmacológicos más allá del alcohol, por lo que no posee acción biológica o fisiológica alguna.
Terapia de Flores de Bach
Los 38 remedios o esencias de Bach fueron desarrollados para ser utilizados como terapia floral. De estos 38 preparados, doce representan a grupos de personalidad llamados curadores; 7 son aspectos secundarios llamados ayudantes, y 19 son esencias “restantes” que vendrían siendo obstáculos o barreras personales en situaciones concretas ajenas a nuestra personalidad, como los sentimientos de inferioridad, culpa y rencor.
Actualmente la terapia flores de Bach es un ritual terapéutico que se utiliza como una variante de la medicina alternativa, el cual pudiera incrementar su efectividad en individuos espirituales ya que los efectos de la espiritualidad sobre la salud son comparables con el efecto placebo.
Es una terapia natural que no interfiere con otras terapias médicas, no tiene contraindicaciones ni efectos secundarios notables, y sus resultados son notables.
La terapia con Flores de Bach debe ser personalizada y puede ser muy positiva en las personas que quieran tratar patrones que les afecten negativamente, sin necesariamente estar enfermas.
Al seguir este tratamiento, lo habitual es tomar las gotas desde un frasco de dilución, pero debemos decidir qué esencias van a formar parte de la terapia según la situación de cada persona.
Todas las esencias pueden combinarse entre sí, por lo que pueden utilizarse juntas en una misma mezcla. Para prepararla necesitarás un frasco de vidrio con gotero de 25 o 30 ml. Las esencias florales elegidas, agua mineral y un chorrito de brandy o coñac. Se vierte el licor hasta ¼ del frasco y luego se llena con agua. A continuación, se agregan 2 gotas de cada esencia, se agita levemente y el remedio estará listo para tomarse.
La recomendación general es tomar cuatro gotas cuatro veces al día, 10 minutos antes o después de las comidas.
¿Cuáles son las Flores de Bach?
Son 38 las Flores de Bach. A continuación mencionamos algunas de las más utilizadas por sus propiedades sanadoras:
- Agrimonía: Alcoholismo, emociones tortuosas.
- Aspen: Sensaciones de terror y ansiedad inexplicable.
- Cherry Plum o Cerasífera: Pensamientos incontrolados e irracionales, miedo de perder el control, tendencias suicidas, ira e impulsividad.
- Clematis: Falta de atención, escape de la realidad.
- Chicory: Sobreprotección, manipulación excesiva, posesión.
- Manzano Silvestre: Personas obsesionadas con la limpieza y el orden.
- Olmo: Personas que se sienten abrumadas por las responsabilidades y se sienten ineptos.
- Genciana: Desánimo, rechazo, pesimismo y depresión.
- Acebo: Celos, desconfianza, envidia, odio y rencor.
- Impaciencia: Impaciencia, irritabilidad.
- Alerce: Falta de confianza en sí mismo.
- Mímulo: Timidez y temor.
- Heliantemo o Jarilla: Ataques de pánico y temor paralizante, pesadillas.
- Sauce: Resentimiento y amargura. Personas que se victimizan.
- Rosa Silvestre: Desinterés, apatía, desmotivación.
Las Flores de Bach han sido probadas como un magnífico método terapéutico para tratar los problemas físicos, mentales y emocionales. Queda en nosotros la responsabilidad de sanarnos y superarnos en todos los aspectos de la vida.