7 tipos de flores resistentes al calor
La primavera se caracteriza por el despertar de la naturaleza viva: flores, árboles, y más plantas cobran vida para ofrecer su variedad de hermosos colores y aromas, y alegrar el entorno que las rodea.
Si lo que deseas es llenar tu hogar de flores que puedan alegrar el ambiente de tu jardín, terraza o interiores; el presente artículo será de tu interés.
Para poder armar tu jardín, tendrás que albergar flores que sean resistentes al calor. Por ello, hoy te compartimos una lista de 7 tipos de flores que toleran el calor, incluso en el verano:
Amaranto
Esta es una planta anual; es decir, sobrevive a todos los climas, aunque prefiere vivir en el calor. Se recomienda resguardarla en épocas de heladas.
Su crecimiento va desde los 45 centímetros, hasta los 180 centímetros. Esto puede variar dependiendo de la especie en cuestión.
Las flores de esta planta aparecen, generalmente, a finales de la temporada de verano. La ubicación preferida de esta planta será aquella donde pueda recibir la luz directa del sol. De hecho, no puede tolerar la sombra.
Su variedad consta de colores cálidos, existiendo en variedades de rojo, dorado, morado y anaranjado. En cuanto al riego, debe ser muy moderado y escaso, pues esta planta no soporta los suelos húmedos.
Flor de araña:
Esta planta cuyo crecimiento va desde los 90 hasta los 150 centímetros, es anual y puede sobrevivir a todas las estaciones del año.
Sus flores de color rosa, blanco y morado, cobran vida a mediados de primavera, y dejarán de aparecer a finales del verano.
Su ubicación preferida será donde reciba los rayos directos del sol; aunque le hará bien tener unos cuantos ratos de sombra. Es muy resistente y tolerante a prácticamente todo, siempre y cuando se le den los cuidados pertinentes.
Cosmos:
Su crecimiento puede variar desde los 60 hasta los 120 centímetros; dependiendo de su cultivo. Es una planta anual, al igual que las anteriores.
Su floración comienza con la llegada de la primavera, y puede continuar hasta los inicios del otoño. Disfruta del sol, y su ubicación debe ser donde reciba la luz directa del mismo.
Sus flores color rosa y blanco son escasas; por lo que un suelo rico no surtirá mucho efecto en su producción y crecimiento.
Gazania:
Una espectacular planta que da vida a una hermosa y exótica flor de color rojo, rosa, amarillo, anaranjado o bronce.
A diferencia de las anteriores; la Gazania no es muy alta, puede crecer desde 15 hasta 40 centímetros; dependiendo de su cultivo. También se distingue de las anteriores en cuanto a su durabilidad: esta flor es perenne, aunque puede ser anual si se cultiva durante las épocas frías (mas no heladas).
Su floración comienza en primavera y finaliza al terminar el verano.
Su ubicación ideal será aquella que sea muy caliente, a pleno sol. Es también resistente a los fuertes y constantes vientos. Le gusta la sequía. De hecho, no puede soportar la humedad excesiva, la lluvia, ni mucho menos los suelos húmedos. Por ello, el riego debe ser muy escaso.
Margarita rastrera:
También conocida como ojo de gallo, esta flor anual aparece desde los principios del verano hasta el final del otoño.
Es muy pequeña, pues su crecimiento va desde los 10 hasta los 20 centímetros.
Esta flor, que puede ser amarilla o anaranjada, disfruta del sol, pero también de la sombra. La ubicación ideal será bajo una sombra que en momentos desaparezca para abrir paso a un poco de luz solar.
Es intolerante al mal drenaje, por ello es importante que la tierra sobre la cual ha sido plantada sea porosa y absorbente.
Girasol mexicano:
Esta flor anual, que puede ser amarilla o anaranjada, es bastante alta. Dependiendo de su cultivo, puede crecer desde 75 centímetros, hasta casi dos metros y medio.
Como todos los girasoles, es amante del calor. Por ello, su floración se da en primavera y verano, y debe plantarse bajo la plena luz del sol.
Un suelo muy rico la debilitará, pues ocasiona que sus tallos pierdan fortaleza. Además, es intolerante al exceso de lluvia.
Rosa mística:
También conocida como flor de papel, esta hermosa flor anual, que además tiene una apariencia bastante exótica, es la que presenta la mayor variedad de colores. Tanto así, que puede ser de cualquier color excepto azul.
Puede crecer desde 10 hasta 120 centímetros; varía con el cultivo.
Disfruta del pleno sol y también de la sombra, así que una ubicación donde reciba ambas cosas será ideal para ella.
Su floración comenzará en verano, y culminará a mediados de otoño.
Esta planta no se puede sofocar ni asfixiar, así que un suelo encharcado, muy húmedo o la falta de circulación del aire podrían matarla.
Todas las flores son muy bellas, y necesitan sus respectivos cuidados. Para disfrutar de ellas, no olvides tomar precauciones, y, ¡disfruta de tu jardín!