6 Errores comunes que debes evitar en el cuidado de las plantas
Tener plantas no es sólo un pasatiempo gratificante, también puedes disfrutar de los muchos beneficios que aportan a tu día a día. Embellecen los espacios, purifican el aire, te dan ingredientes sanos y frescos, ayudan a combatir malestares, contribuyen con la biodiversidad, repelen mosquitos y olores molestos, y mucho más.
Sin embargo, puede que tus plantas no hayan prosperado de forma adecuada. Si tus plantas se secan rápidamente o mueren, si tu jardín no florece o no te da frutos, algo hiciste o estás haciendo mal.
Es fácil cometer errores en los cuidados de las plantas. Si desconocemos aspectos como el tipo de plantas, cuándo abonar o regar, o cuáles son las prácticas adecuadas para la siembra y el crecimiento de un jardín, es muy probable que las cosas no salgan como esperábamos.
Para ayudarte con el cuidado de las plantas te mostramos los errores más comunes que puedes haber cometido en la siembra de tu jardín o que puedes estar cometiendo ahora en el cuidado tus plantas.
Sembrar en el entorno equivocado
Cuando escogemos nuestras plantas es muy importante conocer en qué condiciones climáticas prosperan y considerar el clima de la zona donde las vamos a sembrar. Si por ejemplo plantas romero (que adora la tierra seca) en una zona húmeda, morirá en unas 2 semanas.
Es un grave error escoger las plantas en base a su aspecto o utilidad sin tomar en cuenta el entorno donde crecerá. Esto implica un alto costo en cuanto a riego, tiempo y esfuerzo que no dará un buen resultado.
¿Qué hacer?
Si quieres sembrar plantas en una zona de sombra busca especies que necesiten menos sol, de lo contrario tus plantas se volverán pálidas y débiles por la falta de luz solar.
Si no tienes espacios con mucho sol o sombra, considera sembrar en macetas que se puedan movilizar a cierta hora del día para que reciban la luz o la sombra que necesitan. También elegir plantas autónomas te facilitará el trabajo.
No podar lo suficiente
Así como cortas las puntas de tu cabello para eliminar partes dañadas y favorecer un crecimiento rápido, sano y fuerte, la poda en las plantas cumple la misma función. Esto no sólo les da forma y sentido manteniendo la estética del jardín, sino que aseguramos su correcto desarrollo, propiciamos un mejor brote y floración, las fortalecemos y eliminamos su carga excesiva.
Combinar plantas que tienen distintas necesidades
Para el correcto cuidado de las plantas y su desarrollo, es necesario sembrar cerca plantas y árboles que tengan la misma conducta, las mismas necesidades de luz y nutrición, y la misma velocidad de crecimiento (sobre todo cuando se trata de la siembra directa en el suelo).
Si sembramos una planta de sombra y una planta que requiere abundante luz una al lado de la otra, una de ellas no sobrevivirá. Si el área recibe luz directa, la planta de sombra no sobrevivirá, y viceversa.
Aunque parezca un tanto obvio, es un error muy común que cometen las personas en su jardín cuando se centran más en el diseño que en las necesidades de las plantas.
Sembrar muchas plantas juntas
Todos queremos que nuestro jardín luzca frondoso, así que lo llenamos de plantas sin pensar que éstas crecerán. Plantar ejemplares muy cerca unos de otros sólo hará que cuando alcancen su desarrollo acaben estropeándose.
Cuidado con las raíces invasivas de los árboles que podrán levantar la acera en algunos años.
¿Qué hacer?
Sembrar las plantas con una distancia prudente que no impida su desarrollo posterior. Asimismo elige especies que tengan raíces profundas para que se puedan plantar junto a ellas otras especies sin que las plantas se molesten, y así el espacio se aprovechará al máximo. Esto es ideal para jardines pequeños.
No abonar
La falta de nutrientes en las plantas se puede evidenciar con la decoloración y caída de sus hojas. Una planta que crece en un suelo pobre está destinada a estos efectos.
Para el correcto cuidado de plantas suministra algún tipo de abono, preferiblemente natural como estiércol o abono orgánico, para que se desarrollen sanas y fuertes, coloridas y numerosas.
Utilizar pesticidas químicos
Hay dos peligros con el uso de pesticidas, fungicidas o insecticidas químicos. Estos productos son altamente tóxicos tanto para las plantas como para personas adultas, niños y animales. Además que son altamente contaminantes para el medioambiente.
Especialmente si tus plantas son comestibles, como las hierbas aromáticas y flores, prefiere remedios caseros y naturales para combatir plagas y enfermedades en tus plantas.
Ser precavidos y estar informados acerca de las diferentes especies de plantas y el entorno en el que se desarrollan, son factores clave para tener éxito en el cuidado de las plantas.